Los Premios se encuentran al final de la competencia y no al principio.

Karate Kid es una película llena de lecciones valiosas. "En la vida, como en Karate Kid, no se trata de obtener la recompensa al inicio, sino de perseverar, aprender y crecer a lo largo del camino para ganar el verdadero premio al final".

Para los que no vieron la película Karate Kid, esta fue lanzada en 1984. La cual cuenta la historia de Daniel LaRusso, un adolescente Ítalo – Estadounidense, que se muda con su madre viuda al barrio de Reseda en Los Ángeles. Allí, Daniel se enfrenta al acoso de un grupo de matones, uno de los cuales es Johnny Lawrence, el exnovio de Ali Mills, quien se convierte en el interés amoroso de Daniel.

La película es una historia de superación personal y crecimiento. Daniel, con la ayuda de su maestro, el señor Miyagi, aprende no solo las técnicas del karate, sino también lecciones valiosas sobre el respeto, la paciencia, la humildad y la importancia de mantener el equilibrio en la vida. Una de las escenas más famosas es cuando el señor Miyagi le enseña a Daniel a encerar su coche, diciéndole "encerar, pulir". Aunque al principio Daniel no entiende cómo estas tareas cotidianas pueden ayudarlo a aprender karate, finalmente se da cuenta de que Miyagi le estaba enseñando los movimientos básicos de defensa sin que él se diera cuenta.

Al final, Daniel se enfrenta a sus acosadores en un torneo de karate y, a pesar de las adversidades, logra ganar, demostrando que la verdadera victoria viene de la perseverancia, la determinación y el crecimiento personal.